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Derrota de la vida: el Supremo argentino permite matar un niño surgido de una violación

En Argentina ya está permitido el aborto terapéutico

Actualmente, el aborto es un delito en Argentina, salvo el terapéutico. Pero la justicia argentina ha declarado otro caso de despenalización, al sentenciar que los abortos en mujeres que han sido violadas no son punibles ni pueden estar supeditados a un trámite judicial para ser llevados a cabo.

En un fallo que sienta jurisprudencia, la Corte Suprema confirma así una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la sureña provincia de Chubut, que en marzo de 2010 convalidó el aborto que fue practicado a una adolescente de 15 años que quedó embarazada al ser violada por su padrastro, informaba Efe.

Además, según el fallo, los médicos en ningún caso deben requerir autorización judicial para realizar esta clase de abortos, “debiendo practicarlos requiriendo exclusivamente la declaración jurada de la víctima, o de su representante legal, en la que manifieste que el embarazo es la consecuencia de una violación”.

La Iglesia argentina -informa La Nación– ha rechazado el fallo judicial: “No existe motivo que justifique la eliminación de una vida inocente, ni siquiera en el caso lamentable y triste de una violación”, dijo el arzobispo de Santa Fe y presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo.

Y es que, como indica este documento de Aciprensa, el aborto es “una cura” que únicamente agrava la “enfermedad”. Es decir: si se mata un niño surgido de una violación, se añade otro drama al de la violación. Y la nueva vida está por encima de cualquier otra consideración. Además, se le puede dar en adopción, etc. Pero estos jóvenes lo explican mucho mejor en este vídeo…

Como explicó este martes el director de Hispanidad, Eulogio López, la obsesión del movimiento abortista mundial es conquistar para su causa a la América hispana. Y de momento, van obteniendo algunas victorias, como la de Argentina.

Pero, afortunadamente, todavía hay resistencia en las mentalidades de los países hispanoamericanos, por su defensa de la ley natural -matar es malo; el fin no justifica los medios- y por su fe cristiana.

Por: José Ángel Gutiérrez – www.hispanidad.com

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